Distintas organizaciones populares y militantes ecosocialistas se mantienen movilizados con debates, actividades culturales y concentraciones en varios estados del país, sumándose a la jornada global contra Monsanto, Bayer y Syngenta, y poniendo en el centro de la discusión la defensa de la Ley de Semilla promulgada en 2015.
El primer encuentro se realizó el sábado 21 de mayo en la Plaza de Los Museos en Caracas, donde representantes de diversos movimientos populares se hicieron presentes para recordar la importancia de contar con una Ley de Semillas antitransgénicos y antipatentes, y alertar sobre el avance del agronegocio en Latinoamérica que niega las agriculturas y saberes campesinos, populares y ancestrales.
En Venezuela se está llevando a cabo un fuerte lobby de las transnacionales del agronegocio por medio de mecanismos irregulares de financiación de la actividad agrícola en el país, una campaña agresiva de desprestigio de la semilla campesina, local, indígena y afrodescendiente, mientras se promueve la semilla transgénica. En este contexto, las organizaciones campesinas denuncian la introducción de soja transgénica en el oriente del país y la circulación de semillas de maíz que ha ingresado por contrabando.
En este complejo contexto, intereses contrarios a la soberanía nacional promueven la modificación de nuestra ley de semillas del 2015 (ley redactada y ganada a pulso por el poder popular).
El articulado de la Ley de Semillas declara explícitamente la prohibición de la importación, producción, comercialización, distribución, siembra, uso y multiplicación de organismos y cultivos genéticamente modificados (transgénicos) contenido en el artículo 64.
Además, prohíbe la introducción, liberación, multiplicación y mejoramiento genético de semillas que pongan en peligro los ecosistemas, salud humana o soberanía nacional, en su artículo 65; y prohíbe el otorgamiento de derechos de obtentor, contenido del artículo 66; como herramientas de avanzada para garantizar el bienestar y la vida del pueblo.
Entre los grupos convocantes a esta jornada en Caracas se encontraban: La Campaña Venezuela Libre de Transgénicos, la Fundación Pueblo a Pueblo, el Frente Ecosocialista por la Vida, la Feria Conuquera Agroecológica, entre otras organizaciones.
En este encuentro, Esquisa Omaña, vocera de la Campaña Libre de Transgénicos sostuvo que «nuestra ley de semillas es un escudo protector contra el agronegocio, se trata de una ley única en el continente».
Emma Ortega, integrante del Frente Ecosocialista por la vida, afirmó que «los transgénicos son una mentira, salimos a defender el control de los alimentos en las manos del pueblo que produce y consume. La ley de semillas es tan sentida como nuestra constitución, aprovechemos de germinar la semilla en la conciencia y en el corazón».
Por su parte, William Castillo, Viceministro de las Políticas Antibloqueo quién también estuvo presente en esta jornada manifestó que «hoy las trasnacionales regresan, las mismas trasnacionales que nos bloquearon empiezan a promover por distintas vías la semilla transgénica con el argumento que hay que aumentar la producción agrícola».
Ximena González del Centro de Estudios de Transformaciones Sociales del IVIC y aliada de la Campaña Venezuela Libre de Transgénicos recordó también que la Ley de Semillas fue gestada desde las bases populares en un largo proceso de discusión y consenso.
También en Caracas, la organización «Las Yerbateras» rindieron homenaje al maestro Pablo Characo con la siembra de maíz en el Conuco Argelia Laya reafirmando así el compromiso con la defensa y propagación de las semillas autóctonas. La semilla de maíz Guanape es autóctona, libre de agrotóxicos y de modificaciones genéticas, resistente a plagas y es hija de campesinas y campesinos de Valle Guanape, en el estado Anzoátegui.
Acciones regionales
En el marco de esta jornada mundial, el domingo 22 de mayo, en el estado Mérida, la Escuela Campesina Agroecológica de La Mucuy junto a Mamíferas de Venezuela sostuvieron un encuentro para constituir un frente en defensa de la semilla campesina. En la cita se habló sobre la situación nacional e internacional del uso de los transgénicos, la presencia del agronegocio y sus efectos en la salud y la soberanía de los cuerpos y territorios.
Durante la semana, el Instituto Latinoamericano de Agroecología Paulo Freire en Barinas, la Red de Escuelas Agroecológicas héroes de Canaima en Carabobo, el Consejo Popular de Semillas Ancestrales Táchira (Copsat) en Táchira, la Fundación Pueblo a Pueblo en Trujillo estarán movilizados con actividades para la constitución de Comités locales de garantía de calidad y centros de resguardo de las semillas campesinas, indígenas y afrodescendiente.
Asimismo, el viernes 27 de mayo la gente que defiende la semilla libre de transgénicos realizará un conversatorio online y una actividad presencial y trasmitida a través de las redes en la Universidad Experimental de las Artes (Uneartes) conjuntamente con la Campaña Venezuela libre de transgénicos y el Instituto Latinoamericano de Agroecología Paulo Freire. Discutirán la importancia de la semilla en las culturas populares y los impactos de las semillas transgénicas sobre la agricultura campesina.
El movimiento popular en defensa de la semilla libre de transgénicos convoca a espacios para compartir estrategias, saberes aprendidos y recorridos en el camino de tejer alianzas continentales y fomentar un diálogo entre distintas experiencias de resistencia y crear vínculos que fortalezcan las luchas por la preservación de la vida.